Hace ya un tiempo, tocando el tema de la burbuja
inmobiliaria vimos como el primer español en crear una fue el valido de Felipe
III, el famoso Duque de Lerma.
Hoy en dia, está de moda el "cazar" empresas que
se dedican a las estafas piramidales. Esto parece ser nuevo pero si nos
retrocedemos en el tiempo comprobamos que no es así. La primera estafa
piramidal en nuestro país se dió en la segunda década del siglo XIX y los
implicados eran Baldomera de Larra, si la hija del famoso literato D. Mariano
de Larra, y su marido, Carlos de Montemayor, médico de la Casa Real española.
Doña Baldomera se casó con Carlos de Montemayor, médico de
la Casa Real y su hermana Adela, tuvo relación con el rey Amadeo de Saboya.
Cuando el marido de Baldomera, afrancesado, tuvo que huir por la llegada de
Alfonso XII, dejó a Baldomera e hijos en situación precaria. Eso hizo que ella
tuviera que acudir a prestamistas, a los que pagaba un elevado interés. Ese
pudo ser el origen de su idea e inició de negocio de préstamos.Estamos ante la pionera Pionera de las estafas piramidales
Rápidamente corrió por Madrid la fama de su negocio. Cada
vez atraía a más clientes, por lo que fundó la Caja de Imposiciones, frente a
la cual se formaban largas colas. Operaba a la vista de todos pagando un 30 por
ciento mensual, con el dinero que le daban los nuevos impositores. Todo esto
ocurría en los años setenta del siglo XIX. Incluso llegó a prometer al que le
dejaba una onza de oro que en un mes la devolvería duplicada. Se cree que llegó
a recaudar 22 millones de reales. El escritor Juan Eduardo Zúñiga cifra los
afectados en 5.000. Su fama trascendió fronteras, como lo demuestran periódicos
de entonces como Le Figaro de París y L'Independance Belge de Bruselas.
Doña Baldomera, que en sus inicios de prestamista algunos
agradecidos llamaron la "madre de los pobres", era más conocida como
La Patillas, por los dos tirabuzones que lucía pegados a las orejas.
Si le preguntaban en qué consistía su negocio contestaba:
"Es tan simple como el huevo de Colón". Si le decían cuál era la
garantía de la Caja de imposiciones en caso de quiebra, contestaba:
"¿Garantía?, una sola: tirarse del viaducto", que desde entonces es
elegido por algunos suicidas.
La quiebra le sobrevino en diciembre de 1876. Entonces
desapareció con todo el dinero que pudo. Dos años después se supo que vivía
bajo falsa identidad en Auteuil (Francia). Se pidió su detención y extradición.
Una vez en España, se celebró un juicio. Adujo en su defensa que se fue porque
acabó con menos ingresos que pagos por culpa de las informaciones negativas
contra ella de la prensa.
¡Ay Mariano, qué bien enseñaste a la niña!
La sentencia fue portada de El Imparcial y de La Época el 26
de mayo de 1879. Fue condenada a seis años de prisión. Sus colaboradores fueron
absueltos. Baldomera lo sería poco después, gracias a una campaña de recogida
de firmas, donde participaron desde gente sencilla hasta aristócratas. Muestra
de su popularidad alcanzada son las canciones de la época como El gran camelo y
Doña Baldomera.
De lo que pasó tras su salida de la cárcel hay varias
versiones: Que vivió con su hermano Luis Mariano; que se fue a Cuba con su
marido; que se fue a Buenos Aires y murió allí.
Su método es el origen de lo que posteriormente se llamaría
Esquema Ponzi, bautizado así por Carlo Ponzi, quien tras salir de la cárcel se
convirtió en asesor financiero de Mussolini y al que muchos le atribuyen,
doblemente equivocados, ser el primero en este tipo de estafas piramidales
cuando la pionera fue Baldomera Larra. Además, William Miller ya hizo una
estafa piramidal en 1899. Después vendrían los casos de Gescartera (2001),
Patrick Bennett (1996), Haligiannis (2005), SOFICO (1974), Fidecaya (1982),
Banesto (1993), Fórum Filatélico, Afinsa y el entramado financiero de Bernard
Madoff, entre otros.
VAMOS EL VIVILLO SE QUEDA EN PAÑALES