El origen de la construcción de nuestra Torre de los Guzmanes tenemos que buscarlo en la misma historia de La Algaba una vez reconquistada por los ejércitos cristianos de Fernando III el Santo.
Nuestro pueblo, el fértil y paradisíaco "AL GABBAD" (EL BOSQUE) de los musulmanes, lugar de ocio y descanso cambia de forma drástica su carácter a partir de la conquista llevada a cabo en 1.248 por el monarca católico.
Lo que había sido un lugar de paz y trabajo se convertirá durante dos siglos en un territorio donde la intranquilidad y en muchas casos, la lucha armada por el control y posesión de nuestras fértiles tierras es objetivo fundamental de las disputas y rivalidades nobiliarias de la época.
Reiteradas compra-ventas, tomas por la fuerza, casamientos y posteriores sucesiones y herencias, con alguna que otra excomunión apostólica de por medio, convierten a nuestro querido pueblo en un lugar de inquietud e inseguridad que están detrás del origen y causa de la construción de nuestra heráldica torre.
Todo comenzó el 23 de Noviembre de 1.248 cuando tras más de dos años de asedio Fernando III toma Sevilla. posteriormente, a los pocos años de su muerte su hijo Alfonso X El Sabio ordena repartir la ciudad reservándose para su almacén particular ciertas propiedades, entre ellas La Algaba y el Alaraz, actual barrio algabeño del EL Aral.
A partir, de aquí un ir y venir de La Algaba en manos de la realeza y de la nobleza. Así hasta el año 1.336 en que Enrique II le cede La Algaba y el Alaraz a su criado Gonzalo Sánchez de Campanello.
Años después, el propio rey Enrique II la dona al I Conde de Niebla , Juan Alonso Pérez de Guzmán y las tierras se constituyen en mayorazgo.
Entonces, se inicia una nueva época de inestabilidad para nuestro pueblo; oscuras compraventas, hipotecas, herencias, causan todo tipo de problemas.
El 4 de Mayo de 1.938 Diego González de Medina, toma La Algaba enredando más aún el conflicto.
Meses después de esta toma Doña Beatriz de Castilla vuelve a tomar La Algaba por la fuerza y despoja de sus derechos a D. Juan de Zúñiga, iniciándose un juicio favorable a este último. Pero la condesa no descansaría y vuelve a querellarse ante el Rey contra Don Juan que se la entrega a Da. Leonor.
Los pleitos continuarían muchos años y entre ellos nuevas compraventas como la realizada a favor de Da. Elvira de Zúñiga por un montante de 17.000 doblones.
Para más "inri", el sucesor del condado de Niebla D. Enrique Pérez de Gúzman considera que La Algaba es de su Casa y la vuelve a tomar por la fuerza de las armas.
Con el paso del tiempo D. Pedro de Zúñiga vuelve a tomar La Algaba, pero esta situación duró poco pues Enrique la vuelve a poseer en 8 de Febrero de 1.432; mientras tanto Martín Fernández, subejecutor del Papa ejecuta una excomunión del Papa sobre Pedro de Zúñiga.
Como podemos observar, un continuo conflicto que parece llegar a su fin en 1.440 cuando el Rey Juan II decide cambiar a Juan Alonso Pérez de Guzmán, III Conde de Niebla el señorio de La Algaba, Alaraz y el Vado de las Estacas por Medina Sidonia.
Así Juan de Guzmán, convertido el I Señor de La Algaba manda construir nuestra famosa torre que finalizará en 1.446 con el fín de evitar, asedios y otros conflictos. Es a partir de aqui , cuando vuelve cierta época de tranquilidad al dejar de ser objeto nuestro pueblo de las luchas nobiliarias.